"No tenemos lucha contra carne y sangre, si no contra principados, contra potestades, contra los gobernadores de las tinieblas de este siglo, contra huestes espirituales de maldad en las regiones celestes. " Efesios 6:12

lunes, 13 de julio de 2015

REPÚBLICA DOMINICANA

Destruyeron 1300 equipos de sonido utilizados 
para escuchar música a alto volumen

La ciudad de Santo Domingo no es solo el primer lugar donde desembarcó Cristóbal Colón cuando descubrió América, es también una ciudad caribeña donde erróneamente muchas personas vinculan la alegría con el volumen de la música.
Esto hace que el ruido con contenido semántico sea permanente y el resto de los ciudadanos no puedan vivir en paz, ni descansar y mucho menos realizar algunas actividades intelectuales que requieren de una gran concentración como escribir, pensar, leer, estudiar y trabajar de manera adecuada, ya que carecen del silencio necesario.
Es por eso que el Estado Nacional decidió tomar el toro por las astas y no solo infraccionar a quienes realizan este tipo de prácticas, que molestan y afectan la salud de sus semejantes, sino también decomisar el objeto utilizado (que son los equipos de sonido). Como la medida no dio los frutos esperados y algunos parecieron no darse por enterados, este año el Poder Judicial decidió dar un paso más y redoblar la apuesta: destruir los equipos incautados en la vía pública delante de todos los ciudadanos y en las cercanías de los domicilios donde fueron secuestrados. El objetivo es un claro mensaje al agresor acústico y al resto de la población, para que entiendan que no se permitirá más ningún tipo de fiesta en la que se utilicen amplificadores y el sonido exceda los límites de la propiedad en la que se produce.
En lo que va del 2015 se destruyeron 1300 equipos con sus respectivos baffles y parlantes, con un procedimiento modelo ordenado por la Procuraduría General que consiste en apilar estos aparatos, alinearlos en lugar visible y concurrido, y que quien los destruya sea la Policía Nacional.

Espectáculo
Ya que especialmente los jóvenes reclaman espectáculos, se organiza la destrucción como uno de ellos para que puedan presenciarlo junto a los damnificados y las autoridades judiciales, con la diferencia que, en este caso, el acceso es totalmente gratuito.
Los artefactos reducidos a chatarra fueron secuestrados de vehículos (autos bafflle), cafeterías, billares y domicilios particulares, por miembros de la Procuraduría Especializada en Medio Ambiente y Recursos Naturales y del Departamento Antiruidos de la Policía Nacional.
Sí, aunque parezca increible, en Santo Domingo se creó una estructura específica dentro de la Policía Nacional para decomisar y demoler equipos de sonido.
Con la destrucción de estos equipos, suman aproximadamente 1.300 los desintegrados desde el mes de enero por producir música a alto volumen.
El último “espectáculo”, al que asistieron el procurador general Francisco Domínguez Brito y el jefe de Policía Manuel Castro Castillo, se realizó frente de uno de los inmuebles de Villa Juana, donde había sido incautado el equipo por la Procuraduría del  Distrito Nacional.


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